La organización SATA-IO, encargada de mantener los estándares de la interfaz de conexión Serial ATA, ha liberado recientemente parte de los detalles del nuevo SATA III, el que será en un futuro no muy lejano el más utilizado en discos duros y que vendrá para sustituir a los actuales discos SATA II.
La principal novedad de cara al usuario es un notable incremento de velocidad, de los 3 Gbps del SATA II a los 6 Gbps que tendrá el SATA III, siempre en valores teóricos. Además, traerá una mejor administrador energética (que tal vez suponga un menor consumo) y mantendrá la compatibilidad con las anteriores generaciones de interfaces SATA.